Apuntes de conferencias sobre la verdad dispensacional presentadas por R. A. Huebner
“Dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo, de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.”
Efesios 1:9-10
“En los cielos…en la tierra”
Hay un propósito de Dios, y es el de glorificarse en Cristo. Él manifestará esa gloria en dos esferas bajo la administración de Cristo:
La esfera terrenal: La gloria de Dios se manifestará en el dominio y en el gobierno aquí abajo cuando reina Cristo en la tierra. Cristo será exaltado sobre esto.
La esfera celestial: Cristo es la cabeza, y nosotros somos los miembros de Su cuerpo asociados con Él allí en los lugares celestiales (Efesios 2:6). Como la novia de Isaac compartió con Isaac (quien era el heredero de Abraham), nosotros compartiremos con Cristo en conexión con Su exaltación y gloria.
William Kelly escribe sobre este tiempo de tal manera:
“Esto tomará lugar en el siglo venidero, cuando Cristo será exhibido como Cabeza sobre todas las cosas, y los santos glorificados reinarán con Él. No se trata del momento actual, en el que todavía se permite a Satanás reinar como el dios de este mundo, el príncipe de la potestad del aire; ni tampoco del estado eterno, cuando todo el gobierno haya terminado, y Cristo haya entregado el reino, para que Dios sea todo en todos. Es el milenio que interviene. Será el cumplimiento de los tiempos, habiendo sido los períodos anteriores la preparación necesaria para ello. Mientras tanto, una vez efectuada la redención por medio de la sangre de Cristo, el Espíritu Santo sella al creyente y es la garantía de la herencia”.
W. Kelly, Conferencias sobre la carta de Pablo, el Apóstol, a los Efesios, Londres: Morrish, p. 27, nota, s.f.